La Codificación Espírita de Allan Kardec revela los principios esenciales del Espiritismo en cinco libros que exploran la naturaleza del ser y su evolución espiritual. En resumen:
- Somos espíritus inmortales, que, tras la muerte, seguimos creciendo moral e intelectualmente. La vida no termina, solo cambia de forma.
- La reencarnación nos permite volver una y otra vez, aprendiendo de nuestros errores y perfeccionándonos con cada vida.
- La Ley de Causa y Efecto nos enseña que cada acción tiene consecuencias, y lo que hacemos hoy moldea nuestro futuro, en esta vida y más allá.
- Podemos comunicarnos con los espíritus, quienes nos guían y acompañan, demostrando que el vínculo entre el mundo espiritual y el físico nunca se rompe.
El Espiritismo nos invita a ver la vida como un viaje continuo de aprendizaje y mejora, donde la muerte no es el final, sino una transición hacia nuevas oportunidades.